domingo, 9 de agosto de 2009

!HAY DOLOR Y NO DOLORES!

Foto arreglos de Digitalpaco

Si dejo salir a flote
el dolor que mi alma siente,
puede ser que el inconsciente
parezca un caballo en trote.
Y de mis entrañas brote
un verso desmesurado;
pues espíritu atrapado
dentro de cuatro paredes,
por tiempo piensas que puedes
pero no es justificado.

Yo era una mujer que andaba,
en tacones , pelo suelto,
por la brisa bien revuelto,
mucho más si manejaba.
El mar que me relajaba,
el sol bronceaba mi piel,
sonrisa de cascabel,
que dibujaba a mi paso
aunque cerca del ocaso
siempre mi alegría era fiel.

Todo y hasta el día aquel
que un torrente fiero y frío,
de diagnostico sombrío
puso en mi vida su hiel.
Triste portador cartel
que te marca, que te acuña,
cangrejo con su pezuña
que a tu célula se entalla,
para librar cruel batalla
desde el centro de una uña.

Años de lucha incesante.
Arrodillada oración.
Suplicas y petición,
se vuelven hoy lo constante.
Pero sientes que un instante
cambio todo en torno tuyo,
pasa un algo que no intuyo,
amigos y familiares,
ya no parecen joviales
algo de ti, no es ya tan suyo.

Reacciones que atribuyo
a escaparse del dolor;
y así se aparta el amor
como un celoso cocuyo.
Quedas relegado, instruyo;
por enfermo y ser rompible,
a veces hasta !invisible!
te vuelves ante personas
que no ven si tu razonas
ante un saludo apacible.

Que pena ser tan sensible,
y reclamar el afecto,
que entregastes, con defecto,
pero con gesto aplaudible.
Que dolor tan fuerte, !horrible!
no causa la enfermedad,
es más bien la humanidad
que se encierra, por escape,
a dejar que se destape
su gesto de frialdad.

!Fiero grito!, !fealdad!
escondida en entresijos
hasta tus mejores hijos
rechazan tu realidad.
Yo demando: impunidad,
ternura, piedad, clemencia,
misericordia, paciencia,
propios de sabiduría,
que te colmen de alegría
mejor que de indiferencia.

Pero si existe la ciencia,
la reverente memoria,
también es grata la historia
de luchar con tu conciencia.
Tu sembraste, la experiencia
y de cosecha está escrita,
sabes que no es infinita
la vida que has de vivir
y no puedes preferir
que sea ingrata la visita.

Deja a cada cual su gesto;
sigue adelante mi rima,
paso a paso por la cima
aparta lo que es molesto.
Sigue aquel camino honesto
con dignidad y tezón,
no importa si en un sillón,
sin caminar, con achaques.
en ese puerto que atraques
Dios te dará compasión.

Implora en cada oración
por tus hermanos queridos,
los que están desatendidos
que suplican la atención.
No sientas que el corazón
se achica por pequeñeces,
quien sabe cuanto tu creces
con tu experiencia que triste
parece que se reviste
pero luego te enalteces.

No soy aquella mujer
que taconeaba a la vida;
pero estoy hoy convencida,
que he mejorado mi ser.
Increíble suele haber
lecciones irrepetibles,
fuertes, llegan, sostenibles,
muchas son alentadoras
porque nos enseñan horas
de vivir que son posibles.

Ahora sin pelo, sentada,
frente a la computadora,
aprovecho cada hora
de vida justificada.
O diciendo consternada
un mensaje no trivial,
pues ya nada material
moviliza mis arterias,
las razones son más serias
y son más espiritual.

Quien vive, no es inmortal,
y tanto que uno se entrega
pensando que en la bodega
guardarás para el final.
Vive hoy, vive triunfal,
el instante, este momento,
atrás quedó algún lamento,
ni lo recuerdes siquiera,
pues no sabes quien te espera
a la vuelta del intento.

Y estas décimas que brotan
del centro de mis dolores,
prefiero no las ignores
porque son lágrimas rotas.
Son dolores de mis notas,
de noches de insomnio puro,
son consejos, que te auguro
no te llegan por sorpresa,
todo lo bueno regresa
desde tu mejor conjuro.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Te conocí en el ocaso de una tarde de verano, eras tú en ese dia. Me volví amigo y quedé estancado para seguir siendo tu amigo.